Queda en el olvido la Ciclovía
Son pocos quienes continúan utilizando estos espacios; estaciones no reciben mantenimiento y muchas están cerradas
Al paso de los años, la Ciclovía en Saltillo ha quedado en el olvido, muchos de sus tramos carecen de la pintura que debe indicar que se trata de un espacio exclusivo, pues no se les ha dado mantenimiento desde hace tiempo.
En principales vías como el bulevar Francisco Coss y la avenida Presidente Cárdenas, por ejemplo, es evidente el deterioro de la pintura, pero existen otras zonas en las cuales ya ni siquiera se aprecia que este carril para bicicletas alguna vez estuvo pintado.
Por otra parte, aunque varias cicloestaciones que se encuentran en diversos puntos de la ciudad no están en funcionamiento, cuatro de ellas sí prestan a diario entre seis y 10 bicicletas, el 90% de las cuales son solicitadas por estudiantes.
Uno de los trabajadores de las cicloestaciones señaló que quienes mayormente recurren a éstas son hombres, pues tan solo el 20% de las mujeres llegan en busca de una unidad.
Algunas de las estaciones que han dejado de funcionar se observan vandalizadas, llenas de grafitis y basura, situación que genera un mal aspecto y una percepción de inseguridad.
Un claro ejemplo de esto es la estación ubicada en las calles Benito Juárez y Leona Vicario, la cual tiene un candado que luce como si no se hubiera abierto desde hace mucho tiempo, además de que está completamente pintado con aerosol.
Por la noche, la ciclovía representa un riesgo para todo aquel que quiera usarla, pues varios kilómetros de la que se ubica por el bulevar Fundadores no cuentan con luminaria o las lámparas han dejado de funcionar.
SIN RESPETAR
Lamentablemente la Ciclovía no siempre es respetada por peatones, pero principalmente son los automovilistas quienes conducen sobre ella.
Este espacio es exclusivo para los ciclistas, pero es común ver que hay carros estacionados sobre la Ciclovía y esto ocasiona que se entorpezca el libre tránsito de quienes hacen uso de ella.
Además, los ciclistas corren un grave riesgo durante algunos kilómetros en estas áreas, ya que hay varias que no cuentan con limitante o topes.
Debido a esto, es muy fácil que cualquier automóvil pueda transitar sobre ellas sin importarle que sea una zona de uso exclusivo, siendo esta problemática la que pone en riesgo la integridad de los ciclistas.
En tramos del Distribuidor Vial El Sarape se observaron varios tornillos a lo largo de la Ciclovía, los cuales pertenecían a los topes que estaban colocados en la zona, hecho que también es un riesgo para quienes transitan por aquí.