
Trump refuerza defensa aérea de EU contra drones y da impulso a vuelos supersónicos
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este viernes una serie de decretos orientados a fortalecer las defensas del país frente a posibles amenazas con drones y a promover el desarrollo de aeronaves avanzadas, incluidos taxis aéreos eléctricos y aviones comerciales supersónicos.
Según informó la Casa Blanca, las nuevas medidas buscan facilitar el uso habitual de drones —clave para habilitar servicios como las entregas comerciales—, reducir la dependencia tecnológica de fabricantes chinos y avanzar en la experimentación con aeronaves eléctricas de despegue y aterrizaje vertical.
Entre las disposiciones, Trump ordenó la creación de un grupo de trabajo encargado de garantizar un mayor control del espacio aéreo nacional. Esta iniciativa también contempla la ampliación de las zonas restringidas para drones, el despliegue de tecnología federal para su detección en tiempo real y el apoyo técnico a fuerzas de seguridad estatales y locales.
“El presidente quiere hacer frente a la creciente amenaza del uso criminal y extranjero indebido de drones dentro del espacio aéreo estadounidense”, declaró Michael Kratsios, director de la Oficina de Política Científica y Tecnológica de la Casa Blanca.
Kratsios subrayó la importancia de reforzar la seguridad aérea de cara a eventos masivos como los Juegos Olímpicos y la Copa del Mundo. La preocupación por los drones sospechosos se intensificó el año pasado, tras una serie de avistamientos en Nueva Jersey. Según la FAA, cada mes se reportan más de mil incidentes relacionados con drones cerca de aeropuertos.
Algunos de estos avistamientos han causado interrupciones en vuelos y eventos deportivos.
Otro decreto firmado por Trump instruye a la Administración Federal de Aviación (FAA) a eliminar la prohibición impuesta en 1973 al vuelo supersónico sobre tierra, siempre que las aeronaves no generen un estampido sónico audible en superficie. Aunque los aviones supersónicos han sido cuestionados por su elevado consumo de combustible, el gobierno considera que el avance tecnológico podría permitir vuelos más eficientes sin perturbar a la población.