
México niega prácticas de dumping en el jitomate y buscará nuevo acuerdo con EE.UU.
México niega dumping en el jitomate y busca nuevo acuerdo con EE.UU. ante arancel de Trump
El gobierno de México rechazó este martes las acusaciones del gobierno de Estados Unidos sobre supuestas prácticas de dumping en la exportación de jitomate. Como respuesta a esta acusación, la administración de Donald Trump anunció la imposición de un arancel del 29.91% a las importaciones de jitomate mexicano.
Durante la conferencia matutina, el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdagué, informó que aún quedan 90 días antes de que la medida entre en vigor, y que durante este periodo se buscará un nuevo acuerdo. No obstante, enfatizó que primero se deben analizar a fondo los argumentos presentados por Estados Unidos.
Por su parte, la presidenta Claudia Sheinbaum criticó que su gobierno no fue informado oficialmente sobre la sanción. “La notificación fue enviada a abogados de productores de jitomate en EE.UU., pero no al gobierno mexicano. Eso está mal, el gobierno de México también debió haber sido notificado”, señaló.
Sheinbaum explicó que el jitomate, principalmente proveniente de Sinaloa, se ha exportado a EE.UU. por años. Aclaró que las quejas de productores estadounidenses se basan en el precio más bajo del jitomate mexicano, pero este refleja simplemente el costo de producción. “No hay ningún subsidio, no existe dumping”, subrayó.
Tanto Sheinbaum como Berdagué resaltaron que Estados Unidos no cuenta con una alternativa viable al jitomate mexicano. Aunque una pequeña parte de su producción proviene de Florida, la mayor parte se importa desde México. “Incluso si se aplica esta sanción, el jitomate mexicano seguirá exportándose, pero será más caro para los consumidores estadounidenses”, advirtió la presidenta.
Además, Sheinbaum informó que el secretario Berdagué también está a cargo de las negociaciones sobre el cumplimiento del tratado de 1994 sobre el agua entre México y Estados Unidos. Rechazó versiones periodísticas que aseguran que México está cediendo ante las exigencias del gobierno estadounidense o que existe una fuerte oposición de los gobiernos locales.
La presidenta explicó que debido a las sequías, México no ha cumplido con la cuota de agua establecida en el acuerdo, y actualmente se analiza cuánto se puede entregar este año sin afectar a los productores mexicanos.
“Estamos en diálogo con los gobernadores para llegar a un acuerdo conjunto. Es falso que estemos cediendo de más o que no haya coordinación. Las reuniones continúan y forman parte de la relación bilateral con Estados Unidos”, concluyó.