
Ayatolá Ali Jamenei: “Irán nunca se rendirá ante una guerra impuesta”
El líder supremo de Irán, ayatolá Ali Jamenei, aseguró este miércoles que su país no cederá ante las presiones externas, advirtiendo que Teherán nunca se someterá a los dictados de Israel ni de ninguna otra potencia. Sus declaraciones se producen mientras Irán lanza una nueva ofensiva con misiles hipersónicos en el sexto día de enfrentamientos con Israel.
“La nación iraní rechaza categóricamente tanto una guerra impuesta como una paz forzada. Esta nación jamás se rendirá”, afirmó Jamenei durante un discurso transmitido por televisión.
Además, envió un mensaje contundente a Estados Unidos:
“Los estadounidenses deben saber que cualquier intervención militar de su parte traerá consecuencias irreparables”.
Sus palabras llegan luego de que el expresidente Donald Trump sugiriera públicamente que EE.UU. podría asesinar a Jamenei, lo que ha intensificado las sospechas sobre una implicación directa de Washington en el conflicto iniciado por Israel el pasado viernes.
Ese mismo día, Trump alimentó la incertidumbre al no descartar una participación militar estadounidense:
“Puede que lo hagamos, puede que no”, dijo, al tiempo que exigió la rendición incondicional de Irán.
Según Trump, Irán buscó entablar negociaciones con la Casa Blanca sobre su programa nuclear y un posible alto al fuego, pero “ya es muy tarde”, sentenció el exmandatario.
Un conflicto que escala
El origen del conflicto se remonta al pasado viernes, cuando Israel bombardeó instalaciones iraníes argumentando que buscaba evitar que Teherán desarrolle armas nucleares, algo que el gobierno iraní ha negado reiteradamente.
Este ataque frustró las negociaciones que se llevaban a cabo entre Irán y Estados Unidos para limitar el programa nuclear iraní a cambio del levantamiento de sanciones económicas.
A pesar del conflicto, el jefe negociador iraní, Abás Araqchi, sostuvo que Irán continúa comprometido con la diplomacia, pero que tiene derecho a actuar en legítima defensa.
Advertencias internacionales y crisis humanitaria
El secretario general de la ONU, António Guterres, expresó su preocupación por una posible escalada del conflicto, advirtiendo sobre las graves consecuencias para toda la región.
Desde Moscú, el presidente ruso Vladimir Putin se ofreció como mediador, asegurando que Irán aún no ha solicitado asistencia militar. Aunque evitó pronunciarse sobre el posible asesinato de Jamenei, sí advirtió que los ataques israelíes están fortaleciendo el respaldo popular al gobierno iraní.
Trump, por su parte, descartó la mediación rusa y criticó a Putin:
“Vladimir, primero resuelve lo de Ucrania, luego hablamos de esto”.
Mientras tanto, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, agradeció públicamente a Trump por su respaldo en la “defensa del cielo israelí”.
Desde Asia, Corea del Norte calificó la ofensiva israelí como un acto de terrorismo de Estado, y denunció las muertes de civiles iraníes como crímenes contra la humanidad.
Escasez y daños en infraestructuras clave
Israel afirmó haber destruido la sede de seguridad interna iraní y diversos objetivos militares en Teherán, provocando caos en la capital. Se reportaron filas kilométricas en las gasolineras y escasez de alimentos básicos como arroz, pan, azúcar y té, según testigos en la frontera con Irak.
El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) confirmó que varios edificios clave en Karaj, donde se fabricaban piezas para las centrifugadoras nucleares, fueron destruidos por los bombardeos israelíes.
También fue dañado un centro de investigación en Teherán donde se producían rotores avanzados. Mientras tanto, la televisión iraní informó que los misiles lanzados contra Israel lograron penetrar las defensas del país.
Irán también convocó a la embajadora suiza —representante de los intereses estadounidenses en el país— para presentar una queja formal por los comentarios de Trump. Además, el gobierno anunció nuevas restricciones al internet, acusando a Israel de manipular la red con fines militares.
Escenario de guerra abierta
El conflicto directo entre Irán e Israel, tras años de tensiones encubiertas, llevó a Trump a retirarse antes de tiempo de la cumbre del G7 y a convocar de emergencia a su Consejo de Seguridad Nacional.
Estados Unidos posee el único armamento capaz de destruir instalaciones nucleares iraníes en profundidad: la bomba GBU-57.
Washington anunció un plan de evacuación voluntaria para sus ciudadanos en Israel, mientras varios países europeos comenzaron a repatriar a sus nacionales.
Desde el inicio de los ataques, Israel ha bombardeado múltiples instalaciones militares y científicas, causando la muerte de altos mandos del ejército iraní y científicos. Sin embargo, también se reportan víctimas civiles en ambos bandos: al menos 224 muertos en Irán y 24 en Israel, según los últimos datos oficiales.