
Morena perfila control de la Suprema Corte tras elección judicial
Tras la histórica elección judicial del pasado 1 de junio, el partido Morena se perfila para controlar la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), al encabezar con sus candidatos las nueve posiciones en disputa. De acuerdo con el conteo preliminar del Instituto Nacional Electoral (INE), que ya supera el 99 % de actas computadas, todos los aspirantes con mayores votos son cercanos al oficialismo o destacados en las guías de votación distribuidas por operadores políticos del partido.
Los nueve perfiles que se proyectan como próximos ministros fueron propuestos por la presidenta Claudia Sheinbaum o surgieron de acuerdos entre el Ejecutivo y el Congreso, donde Morena mantiene mayoría. Aunque el INE aún no ha emitido los resultados oficiales, se prevé que lo haga en las próximas horas.
Entre las cinco candidatas con mayor votación figuran Lenia Batres, Yasmín Esquivel y Loretta Ortiz —actuales ministras propuestas durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador—, así como María Estela Ríos y Sara Irene Herrerías, también con vínculos cercanos al expresidente.
Por su parte, los cuatro aspirantes mejor posicionados para integrarse a la Corte son Hugo Aguilar Ortiz, Giovanni Figueroa, Irving Espinosa y Aristídes Guerrero. Aguilar Ortiz, abogado mixteco y actual coordinador general de Derechos Indígenas en el INPI, es afín al movimiento de la Cuarta Transformación y se perfila como el próximo presidente del máximo tribunal.
Aunque Figueroa, Espinosa y Guerrero no tienen vínculos directos con Morena, sus nombres figuraron en los llamados “acordeones” que simpatizantes del partido repartieron durante la campaña para orientar el voto ciudadano.
Con esta renovación, la Corte pasará de 11 a 9 integrantes y los periodos de encargo se reducirán de 15 a 12 años, en cumplimiento de la reforma constitucional aprobada en septiembre de 2024, que estableció la elección directa de jueces, magistrados y ministros.
Se trata de un modelo inédito a nivel mundial: por primera vez, más de 800 cargos judiciales fueron sometidos al voto popular. Sin embargo, la participación ciudadana fue limitada, con apenas un 13 % de los casi 100 millones de electores convocados, según cifras preliminares del INE.
El proceso enfrenta ahora el reto del cómputo final de votos, que podría prolongarse hasta el 15 de junio, fecha prevista para la oficialización de los resultados.