
Fracasa designación de magistrados en el Senado y crecen tensiones en Morena: Adán Augusto, en la mira
El Senado de la República vivió este martes un revés inesperado para Morena, al no lograr los votos necesarios para aprobar la designación de 56 magistrados electorales en 30 estados del país. El hecho ha generado tensiones internas en la 4T y ha puesto bajo la lupa al coordinador de la bancada oficialista, Adán Augusto López Hernández, quien sospecha de “fuego amigo” por parte de algunas figuras del propio movimiento.
La votación, que requería mayoría calificada, solo alcanzó 72 votos de los 86 necesarios, lo que encendió las alarmas dentro del grupo parlamentario. El proceso se llevó a cabo por medio de voto secreto en cédula, lo que impide conocer exactamente quién votó en contra y ha desatado especulaciones sobre una posible fractura interna.
Las miradas apuntan hacia las gobernadoras de Campeche (Layda Sansores), Tlaxcala (Lorena Cuéllar) y Estado de México (Delfina Gómez), quienes, según versiones en el Senado, habrían promovido la ruptura como parte de su creciente distanciamiento con Adán Augusto. Las tres mandatarias han tenido roces con el exsecretario de Gobernación, especialmente a raíz de sus recientes movimientos políticos con miras al proceso electoral de 2027.
El episodio también coincide con un llamado de atención de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien en su conferencia matutina criticó prácticas de nepotismo al interior del partido, haciendo alusión a denuncias contra Andrea Chávez, cercana a Adán Augusto, por su presunta precampaña en Chihuahua.
Fuentes legislativas aseguran que el fracaso de la votación desató una ola de malestar en Palacio Nacional, donde se esperaba una sesión sin contratiempos. El uso de la votación en cédula, si bien legal, imposibilita cualquier tipo de control de línea partidista, lo que ha encendido las alarmas en la cúpula de Morena.
La derrota ha sido interpretada como una señal clara de que las lealtades dentro del oficialismo están cambiando, y que Adán Augusto, quien en el pasado tuvo el respaldo de varias figuras clave, empieza a enfrentar resistencias internas debido a su nueva estrategia de cara al futuro político del movimiento.
En respuesta, algunos gobernadores estarían considerando un nuevo “Operativo Enjambre”, similar al que se utilizó en procesos anteriores para reforzar la disciplina interna, mientras crecen las dudas sobre el control que Adán Augusto realmente mantiene dentro del bloque legislativo.