
El nearshoring no avanza por falta de infraestructura.
Los suministros eléctricos y de agua son esenciales para atraer inversiones por la relocalización de empresas.
Uno de los grandes retos de la economía mexicana por atender es la falta de infraestructura, coincidieron especialistas.
ndicaron que si bien la economía seguirá creciendo en 2024 y 2025, será a niveles inferiores al de 2023, cuando el crecimiento fue de 3.2%; no obstante, hay oportunidades para acelerar la dinámica económica y la principal es aprovechar la relocalización de empresas para estar cerca del mercado estadounidense, fenómeno conocido como nearshoring.
“La principal oportunidad (para crecer) es el nearshoring. No vamos a crecer al 8%, pero creo que sí podemos crecer a 3% o 4% de manera sostenida si lo aprovechamos tantito más, para eso se necesita poner ciertas condiciones”, señaló la directora de análisis económico de Grupo Financiero BASE, Gabriela Siller.
Durante su participación en el panel “Retos de la transición, perspectivas trimestrales”, organizado por el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), advirtió que el nearshoring está muy focalizado en unas pocas industrias y en pocas entidades federativas, además de que se necesita gastar más en infraestructura, especialmente en energía eléctrica y agua, y asegurar que exista certeza de que estos insumos no faltarán en el futuro.
Además, dijo Siller, se necesita que exista certidumbre por la política económica interna, carreteras seguras y promocionar a México en el exterior, pues hay otros países que no están junto a Estados Unidos y están aprovechando la relocalización global.
En el mismo espacio, el director de Estudios Económicos de Santander México, Rodrigo Barros, agregó que el país tiene los costos de transporte más bajos, el mercado de consumo más grande del mundo (Estados Unidos), y una gran base exportadora y bastante sofisticada, aunado a que México es el mayor país del que la Unión Americana importa.
Sin embargo, apuntó, se necesita que México atienda algunos retos, como un marco regulatorio amigable y claro; provisión de energía clara, confiable y moderna; cuestiones ambientales; abastecimiento de agua y de capital humano, “yo creo que de eso depende qué tanto impacto pueda tener el nearshoring”.
Gabriela Siller aseguró que si México atiende estos retos, se generaría mayor inversión fija de locales, lo que llevaría a un círculo virtuoso, pues el capital es muy importante, “necesitamos que llegue capital y también que inviertan porque sí hay dinero para invertir, pero está detenido”.
Agregó que antes 15% de la inversión extranjera directa era por la reforma energética, por lo que si se “descongela”, eventualmente llegaría más inversión, y eso ayudaría a tener un mayor crecimiento económico.
Rodrigo Barros añadió que otras oportunidades para México se relacionan con el bono demográfico, con una o dos décadas por delante donde la población además de trabajar seguirá creciendo, aunado a un mercado doméstico grande que se ha ido consolidando y un gran potencial de penetración financiera.