
Política Monetaria
Divide a Banxico la posibilidad de hacer un primer recorte a la tasa de interés en marzo
Algunos miembros de la junta de gobierno analizan un primer movimiento “fino”, pero hay quienes consideran aún un escenario inflacionario “desafiante”.

Irene Espinosa, subgoberandora de Banxico.
A diferencia de lo que dice el consenso del mercado, al interior Banco de México (Banxico) hay un fuerte debate sobre las posibilidades que tendrán de realizar un primer recorte a la tasa de interés en marzo de 2024, tras pausar el ciclo de alzas este mayo, según se puede observar en las minutas publicadas este jueves.
En su reunión del pasado 8 de noviembre, la junta de gobierno que encabeza Victoria Rodríguez acordó mantener la tasa en 11.25% de manera unánime, sin embargo, hubo división respecto al mensaje guía que está enviando el banco central: la subgobernadora Irene Espinosa Castellano fue enfática en los retos para lograr el objetivo de 3% en 2025 y por lo tanto, consideró que no es prudente plantear actualmente un recorte a la tasa de interés en el primer trimestre del próximo año.
Sucede que durante el diálogo al menos dos integrantes de la junta pusieron sobre la mesa una próxima jugada, en línea con las expectativas del mercado. “En las reuniones del primer trimestre de 2024 se podría comenzar a evaluar la posibilidad de ajustar a la baja la tasa de referencia”, señaló uno. Aunque resaltó que serían movimientos graduales y que no necesariamente se tratarían de disminuciones continuas.
En la misma línea, otro coincidió en que en las decisiones del primer trimestre de 2024 podría empezar a discutirse la posibilidad de “un ajuste fino” en la tasa de referencia, aunque también recomendó comunicar que no se descartan ajustes ocasionales y graduales 9 durante los primeros trimestres del próximo año.
En ese sentido, la subgobernadora replicó que la convergencia a la meta en el segundo trimestre de 2025 “se ha vuelto más desafiante” y bajo ese argumento consideró que el sesgo al alza en el balance riesgos para la inflación se ha incrementado, por lo que consideró poco prudente plantear movimientos en el mediano plazo, sino mantener una postura abierta.
“Considero que debemos mantener la prudencia y cautela en nuestra comunicación y evitar adelantarnos en modificar la guía prospectiva ante el elevado nivel de incertidumbre sobre la trayectoria descendente de la inflación”, dijo.
No fue la única opinión similar. En las minutas se puede observar que otro miembro consideró que debe la postura monetaria restrictiva “debe preservarse a lo largo del horizonte de pronóstico con la finalidad de mitigar riesgos, afianzar la tendencia a la baja de la inflación y seguir propiciando el descenso de sus expectativas”.
En un tono más neutral, se reflejó otra opinión: “Dado el incremento de la tasa real ex-ante y las condiciones monetarias más apretadas, que se reflejan en el tipo de cambio real y en instrumentos de mercado, podría evaluarse más adelante si el proceso desinflacionario observado y anticipado sería compatible con niveles inferiores de la tasa nominal”.
Si bien los cinco integrantes de la junta de gobierno consideran que la inflación ha descendido, advierten riesgos que pueden materializarse para el cierre de este año y el inicio del próximo, tanto por cuestiones externas como internas.
Algunos de estos temores ya empiezan a materializarse, como se observó en el dato de inflación de la primera quincena de noviembre, en donde se observó un ligero repunte a 4.32% a tasa anual. Algunos especialistas anticipan que no bajará más en lo que resta del año.